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／ Se giró a verlo con ese ceño fruncido, malhumorado.       Yo apenas te rocé, y tú me agarraste muy bruscamente. ¡Eso no se hace! ／ Asiente dejándose guiar por él, rebusca entre sus bolsillos hasta encontrar un par de guantes blancos y colocárselos.       En realidad... bueno, no importa. Vayamos a comer. ／ Camina con él, deteniéndose cuando llegan a la puerta del restaurante.       ¿Es un lugar con mucha gente?

Ha... ／ Aparta su mano, iba por abrir la puerta justo al ser jalado así. Los nervios lo consumen, ya que por un momento se había creído su caballerosidad. Baja la vista a sus labios, notando el tacto de los suyos con ellos.       Y-yo... v-vamos a comer. ／ Se suelta en un movimiento rápido, bajándose corriendo del coche. Debajo de su gabardina se ve algo de movimiento en su espalda, debido a sus alas que se mueven rápidamente ante esa inquietud. Su rostro es de frustración al estar rojo, cubriéndose este con las manos.

Qué caballero~ ／ Expulsa una risita amargada y asiente.       No tengas miedo, no es como que quiera matarte. Puedo controlarlo bien. Mira, verás que no te mueres. ／ Le pasa la mano por el brazo mientras conduce, luego bajándolo hasta el muslo para darle un suave apretón. Se aprovecha de que está concentrado.       ¿Le dices eso a todos? Tú eres quien dijo que estaba amargado, este es mi mood normal. No te preocupes por mí.