Seth.

Ah, tú. Pequeña grosera. ¿Y se puede saber por qué recién te atreves a llegar? Quedamos en vernos, como siempre, a esta hora, en este lugar. Y lo que te digo no es la primera vez, claro que no. Y lo sabes perfectamente. ¿Qué te mantiene tan distraída, eh? ¿Es acaso el cara de imbécil que parece tu garrapata a donde sea que vayas? ¿No tiene casa o por qué siempre tiene que estar sin dejarte respirar? No me salgas con que empezarás a reemplazarme por ese─ digo, a reemplazarnos, somos un equipo, ¿no? Los demás también te echan de menos. No estaría mal poner en su lugar al insoportable de tu amiguito. Tiene que saber que tú SÍ tienes más personas con las que, obviamente, disfrutas aún más pasar tiempo. 

Por lo menos eres consciente en ello, ni siquiera pude dormir bien esa noche. Más bien ni siquiera logré pegar un ojo en toda la madrugada, con la cabeza matándome como si hubiera tenido la culpa de algo. ¿Fue así? Sácame de esa duda. ¿Acaso lo que pasó fue por mi culpa? ¿Te hice sentir incómoda? Solo quería que te sintieras protegida, esa vez intenté darte un abrazo y estallaste, así que mi mente divaga con el pensamiento de haberte hecho sentir mal. Soy empalagoso y eso es molesto, lo comprendo. Pero me hirió, y no sabes cuánto. Podrías habérmelo hecho saber, yo siempre te escucho, cada lo que necesites y te lo recordaba diario... Mierda, estoy hablando demasiado, es para no ahogarme conmigo mismo. Yo creía que sí lo seríamos, y por mucho tiempo, por mi cabeza pasó; "quizá solo necesita espacio, el trabajo la tiene atareada. No le jodas ahora, Remo", y yo entenderé si lo que deseas es estar solo contigo. ¿De qué tienes miedo? Es que en serio no comprendo nada en lo absoluto, ¿fue Seth? ¿Alguien del estudio? ¿Los fanáticos? No lo sé. No puedo cambiar la manera en la que te veo ahora, Kaylee, te desconocí por completo, no reconocí a la chiquilla extravagante a la que le encanta pasar tiempo conmigo sea como sea. Con tal de hacerla sonreír un rato. Hey, ya. De acuerdo. No digas eso. De verdad no me gusta que nos hagamos daño mutuamente, pero solo quiero que comprendas mi punto. Así como yo quiero que estés bien, pero necesito que seas sincera. Por favor. Yo prometí cuidarte. Déjame hacerlo y aprender cómo, sé que soy algo bruto pero lo haré para mantenernos fuertes, lo juro. 

¿Y tú por qué estás aquí? En serio que ya no se puede confiar en nadie. Ni siquiera en esa mujer, y no sé por qué me sorprende. Claro, señorita, pero primeo tú vas a escucharme a mi. ¿Te parece relativamente correcto venir con esa cara y pedirme un momento para "platicar"? Hace nada me trataste como si fuera una basura. La única razón por la que no te insistí en arreglarlo fue porque por primera vez en estos años de amistad sentí rechazo en tu mirada, como si hablaras en serio cuando me escupiste que no me querías cerca tuyo nunca más, y solo atiné a cumplir con tus órdenes. ¿Sabes lo que sentí? Dios, Kaylee, nunca había tenido tanta comodidad en una persona además de los chicos, y buscas alejarme sin darte el tiempo en darme una explicación, y cuando tú deseas por fin hacerlo ya me has roto... ¿Y sabes que es lo peor de todo esto? Que no puedo tener ni una pizca de odio hacia ti, porque eres de las personas más importantes en mi vida, me hiciste creer en mí nuevamente cuando estuve atorado en un gran vacío oscuro. ¿Qué haces aquí, Kaylee? En serio no quiero volver a sentirme solo gracias a ti. Se supone que tú nunca me harías sentir abandonado, y yo haría lo mismo contigo. Era una promesa. 

Ya te dije, una noticia, ¿tan atontada te dejé con mi presencia que no lograste escucharme? Calma, vine en son de paz, y me recibes con insultos, pero y eso que no has escuchado TODO lo que tengo por decir de tu noviecito ese, se ve desde lejos que es un patán. Lo sabía, con razón ese idiota estaba tan extraño, ¿cómo le haces para controlar a todos, listilla? ¿Acaso es tu don? Vamos, Kay, tú y yo sabemos lo que en realidad pasó, deja de hacernos esto otra vez, no sigamos mi ejemplo de cobardía. Estoy harto de esto, ¿crees que vengo aquí en vano? ¿Solo para hacerte escenitas? No, vengo a demostrar que no me quedaré de brazos cruzados viendo como otro tipejo te pone las manos encima, quién sabe qué intenciones tiene. ¿Qué? Pero qué mierda─ no, mírame a los ojos y trata de pronunciar esas palabras de nuevo. ¿"El indicado"? ¿Piensas que esto está bien? Te están jodiendo toda la cabeza. No, no, no, ya te dije, no me quitaré, sé lo ruidosa que eres, así que anda, grita, no me interesa. Quiero ver qué tan capaz eres de sacarme de aquí mismo. 

¿Es en serio de lo que me acabo de enterar, Romanov? Y por una estúpida noticia, literalmente la revista golpeó mi rostro con la enorme primicia de tu nueva "relación". Ah, y sí, logré bloquear de nuevo a tus guardaespaldas, consíguete unos mejores. ¿Y bien? Quisiera oír de tus propios labios si es o no verdad. Escucha, sé de todo lo que pasó pero, ¿fuiste por alguien más? Ni siquiera me enteré por Remo, tal parece que lo tienes bien acorralado a ti. Por favor, hablemos, y no intentes botarme porque primero debes de pasar por encima mío, rubia.

Notó mi desesperación y lo hizo, fin de la historia, no seas tan cruel con él, soy el culpable. ¿En serio hablarás de ella ahora? Sabes perfectamente cómo son las cosas, y yo también sé muy bien como es todo esto de tu enamoradito, seré algo idiota, pero tampoco a tal nivel. ¿Acabas de admitir que con una sola palabra puedo ponerte en tal estado? Lo sabía, Romanov, guarda esa gran mentira para cuando las cámaras estén frente a ti. Rubia, calla tus bonitos labios un segundo y presta atención a tus palabras, ¿acabas a insinuar que te ha complacido mil veces mejor que yo? Es lo más incoherente que he escuchado en toda la noche, ambos sabemos que mientes, mientes tan mal, el único que te hace sentirte en el cielo en tal ámbito soy yo, y aún puedo demostrártelo. Calla, no es que me hayas dado en el ego, sólo soy algo débil ante las mentiras, y no te permito que trates de negarme eso. No, no, quiero verte intentar quitarme de esta puerta, Kay. Quieres que esté aquí, quieres que interrumpa tu muy, seguramente, aburrida cita con ese imbecil. Por favor, solo somos tú y yo, no planeo dejarte ir una vez más justo ahora, ya me harté de esa porquería, de actuar como cobarde frente a ti. Esto no acabará mal si no me lo impides, porque perfectamente sabes que lo deseas tanto como yo. 

Digamos que mi estimado compadre te ha traicionado un poco. Me conoce perfectamente y me tiene más aprecio al parecer, te gané. ¿Sabes que es terrible enterarte por una simple página de chismes, Romanov? Ni siquiera el tarado de Remo se atrevió a decírmelo, en serio que tienes a todos comiendo de la palma de tu mano, y a mi solo me rodea una manga de traidores. ¡Bah! ¿Quieres contarme más? Andas demasiado graciosa, con una chispa, en serio. ¿Te has atrevido a decir que eres feliz y lo quieres demasiado? ¿De verdad? A ver, ¿eres capaz de decir que lo amas, rubia? Quisiera escucharlo de tus propios labios. Esos mismos que hace unos meses me pertenecían (y aún) a mi, unos que sólo me besaban a mí. Siendo sincero me importa un bledo tu enamoradito ese, por mi puede quedarse esperando hasta que sus piernas se derritan, no me interesa, estoy aquí por ti. Quiero ver que intentes buscar una manera de alejarme, anda, hazlo, pero déjame decirte que no me sacarán hasta que cumpla mi objetivo. Y sabes que no bromeo para nada. 

¿Ya te han dejado respirar, rubia? No te espantes, solo soy yo, presentía la falta que te hacia y es por eso que hice de todo para escabullirme. Es difícil encontrarte estos días. ¿Así que en serio te has fijado en ese patán? Lo acabo de ver de reojo hace un instante y en serio me he decepcionado, Romanov. Yo... Solo quiero hablar, ¿me permites eso? Por favor. 

Kaylee, ¿pero qué mierda? Sé que un nuevo proyecto es sumamente importante y requiere de toda tu atención, ¡hola! También soy cantante, te lo recuerdo, sé lo que se siente. Pero no es motivo para tu forma de ser, ¿te estás siquiera escuchando? ¿En serio quieres que deje de ser tan "metiche" con la vida de la persona que más me importa en este momento? Sabes que siempre me vas a preocupar, demonios, parece que no te ha quedado claro cuando ya han pasado meses desde que te demostré lo mucho que me gustas. Dios, ¿qué carajos estás diciendo? ¿Se te cruza por la cabeza que te obligare a eso? No soy ningún enfermo, Kaylee. Mucho menos un monstruo. No, no me iré a ningún lado, estoy aquí para escuchar qué te está pasando, sabes perfectamente que no eres así, no puedo dejar que te vayas de esa manera y ya, menos en ese estado. Háblame, amor. No me dejes así, por favor, no sabes lo que estás provocando con esas palabras, no tienes idea. 

¡Te encontré! ¿Por qué tan desaparecida, eh? ¿Acaso tratas de huir de mí, rubiecita? Pues te será imposible. Hasta se me hace raro que no andes soltando cualquier comentario bobo o extraño en todo momento inoportuno, puede que extrañe eso... Y también a ti. Anda, ¿me vas contar qué pasa por esa cabecita tuya? ¿Es grave? No me preocupes, por favor. No lo sé, es que ayer me dejaste demasiado confundido con esa actitud fría, algo sorprendente porque eres una chica atrevida y coqueta, esperaba algún beso como mínimo, llámame un maldito dramático pero parece que no he probado tus labios desde hace siglos, Romanov.