¡Mi cielo! Siento tanto mi tardanza. He estado
con pendientes durante la mañana entera. ¿Tú
escuchaste todo aquel escándalo en casa? Pues
era yo, corriendo de un lado a otro. Lo que pasa
es que, quería dejar todo perfectamente listo
y terminado antes de venir a nuestro descanso.
¡Me pone tan feliz verte, hijo mío! Pero y... ¿Qué
pasa con hermanos y tu padre? Todavía no se
encuentran aquí, ¿Cierto? ¡No puedo creerlo!.