❀ 𝐷𝑒𝑎𝑟, Lily.

Ese mismo. De todos los hijos de muggles que hay aquí, siempre has sido la que mejor que me ha caído, Evans. No me malentiendas. Aún no he visto a mi hermana, pero sé que a Peter se le hizo tarde al igual que a mí... seguro no tarda en venir. Se nota que la adivinación no te va muy bien, tal vez deberías procurar poner más atención en clase o quizás buscarte otra asignatura. Jamás sigo la sensatez de mi querida hermana, si eso responde a tu pregunta. Gracias por la bienvenida, por cierto.

¡LILIANA! Por Salazar, estuve como loca buscándote por todos los pasillos del castillo. Filch casi me asesina al verme merodeando por segunda vez en el tercer piso. ¿Dónde estabas? Se supone que eres la más puntual de los leones; hasta Marlene llegó temprano. De todas formas, no importa, ¡te extrañé tanto! Ya no soportaba estar solita con todos estos dementes, tu eres la única persona con razonamiento en este lugar. Era mi perdición sin tí. Por cierto, todavía espero que vayas a ver mi próximos entrenamiento, lo prometiste.

Qué mujer tan hermosa eres, tu cabello parece hecho de caoba. Te deseo una amena estadía, Evans, bienvenida.

¡Evans! Qué sorpresa verte. ¿Y cómo es que el cuatro ojos de Potter no anda pegado a ti esta vez? Ya casi parece tu sombra con lo mucho que te sigue a todas partes. Si algún día llegas a cansarte de él, con gusto puedo enseñarte un encantamiento para quitártelo de encima. Piénsalo, guapa.

¡La única con cerebro! Hasta que apareciste, ya me estaba preocupando; incluso estaba a punto de enviar a Peter en tu búsqueda. ¿Sigue en pie lo de enseñarme sobre el mundo muggle? Me vendría de mucha ayuda, o terminaré reprobando Estudios Muggles... otra vez. Mis padres me han dado un ultimátum. Apiádate de mí, Lilyflor.

LLEGÓ EL AMOR DE MI VIDA. ¡No le digas a Dorcas! Me odiara después. ¡Lily Evans! Nunca vuelvas a dejarme así, ¿qué mosco te picó? ¿Por qué decidiste que era buena idea dejar a tu mejor amiga con apego ansioso a su suerte? Te extrañé tanto, pelirroja. Me debes una tarde de chicas, sin ninguna interrupción. ¡Y sin Remus! Siempre viene, a este paso él ya es una chica más. Y yo quiero mi dosis diaria, y muy completa, de Lilyflor. Te amo, ¿lo sabías?.