¡No, no, no! Dime muchos de esos, sería tan lindo, además, yo también te dedicaré algunos de mis piropos conocidos, más de los habituales, por supuesto. Oh, no, ¡no te disculpes! Perdóname a mí por tanta insistencia, soy algo molesta, ya sabes. ¿Te reíste de esa desgracia? Casi me hace desmayar esa demente, pero bueno, por lo menos pude darte un buen rato. ¡Bueno! Tampoco es como tenga intención de negarlo, la verdad la idea suena genial y súper tentadora, aunque si no gustas, bueno, yo lo entien─... Espera, ¿¡me acabas de decir que sí, Lily Evans!? ¡Está bien, está bien! Pero es que, ES INEVITABLE, en mi habitación creo que me pondré a gritar y bailar, sin que me veas, claro, ¡para que no se rompan tus preciosos oídos! Soy la mujer más feliz en estos momentos, no me culpes, en serio estoy hiperventilando. Me vas a poner roja, Lily, ¡y se supone que yo debería de lograr eso en ti! Aunque, bueno, no me disgusta para nada la verdad, es más, saber eso me ha alegrado demasiado, y adivina qué, a mí solo me interesa cierta pelirroja de ojos esmeralda bellísimos. ¡El lago! Suena perfecto, LilyFlor, acepto. Hey, no deberías de tener esa fama de mí, no nos meteremos en problemas por demostrarnos afecto romántico y físico a escondidas, ¡digo! Me refiero a que, uhm, nada, olvídalo. ¡De acuerdo, de acuerdo! Te dejaré ser con tu apuesta, porque es claro que ganaré (pero de igual forma pagaré la cena.)