Hace como un año, me acosté con alguien, me conoces lo suficiente para saber que fue sin protección. El caso es que, me embaracé, pero estaba segura de que el papá no aceptaría al bebé, no quería que viviera una vida de rechazo así que decidí abortar. Su alma como la de todos los fetos abortados cayó en los campos Eliseos, mamá lo encontró, supo que era mío no tengo idea cómo; pasa que la trajo de vuelta a la vida y la crió ahí hasta hoy, que me la envió de regreso. Se llama Nérida, su padre, es Wade.