Aquella tarotista del pueblo que un día desapareció y luego volvió sin más. La primera víctima de la bruja y a quien esta le tuvo compasión por formar parte de su linaje.
Fue retenida por la bruja durante varios días y con tal de ser libre se ofreció a ayudarle a conseguir víctimas, sin embargo, pagó un precio muy caro, su amor verdadero, a quién guió hacia su perdición y ahora forma parte de la macabra colección de almas de Coraline, su segunda víctima.
« Pobre Meridia. . ¿Las cartas no te lo advirtieron? »