Hablas conmigo, el que disfruta hasta de la compañía un caracol... Un placer, Onu. Yo soy Zeus, no tengo ningún acortamiento, je. ── correspondió con un apretón de manos eléctrico. Adoraba hacer aquello, era como pactar una amistad, y sentir que era visto como un Dios amigable. ── No sé porque no nos habíamos visto antes, ¡me da gusto hacerlo ahora! ¿Te gustan las carnitas?