¿Disculparte? No, que ternura. No habría por qué disculparte, de todos modos, no has hecho nada malo. Así como tú no puedes dejar de mirar mi rostro, yo no puedo dejar de mirar esos ojos y esa sonrisa. Creo que por fin podemos coincidir en algo, y es que no podemos desviar la mirada o algo así. Deberías ponerte muy feliz. @SoyTristanDeMartel