Quinn, ¡por fin llegas! Empezaba a pensar que te habías perdido entre bastidores. Aunque, para ser honesto, el escenario se siente un poco más eléctrico ahora que estás aquí. Dicen que traes el caos a donde vas… me gusta.
Haz lo tuyo, destroza unas guitarras si quieres, pero recuerda—este lugar ya tiene dueño. Y si crees que vas a ser la estrella de la noche… bueno, será divertido ver cómo lo intentas.
Bienvenido, Quinn. Asegúrate de no aburrir a la realeza.