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he descubierto que lo harías, te pida o
            no por favor... así que, de momento, lo
            seguiré haciendo de esta forma... a no
            ser que algún día te sorprenda pidiendo
            como es debido. /devolver sonrisa y 
            resoplar.    me gustaría que fuera la
            tuya, así no habría lamido la de un 
            desconocido... pero sabiendo que 
            eres un vampiro, lo más probable es 
            que hayas comido hace poco. /alzar
            la mirada a él, con los labios y parte
            de las mejillas manchados de sangre,
            y gruñir.    cállate o te morderé, no me
            trates como si llevara correa. /alzar las
            orejas al notarse apegado a él, y seguir
            con su tarea. insistente, recorrer su 
            piel. cerrar los ojos, subiendo entonces
            a su mandíbula.    el buen chico eres tú,
            tan obediente.

preferiría verlo como una petición, 
            pero si con una orden consigo que
            hagas caso a lo que te digo, entonces 
            sí es una orden. /seguir con la mirada 
            y observarlo muy atento una vez el
            ajeno estuvo a su altura.    ¿es tuya?
            /olfatear, acercándose un poco más 
            a él. tomarlo de la camisa y atraerlo
            para lamer su cuello.   para limpiarte.

/alzar las orejas de golpe al notar el
            cómo se deslizaba la mano del ajeno
            por su tez y empezar a mover la cola
            de un lado a otro, plácido. apretar los
            labios, haciendo el pequeño ademán 
            de restregarse contra sus nudillos. 
            terminar por hacerlo cuando se detuvo.
            eso me lo esperaba menos... oye, tus
            manos— son suaves, sigue haciendo 
            eso.

/suspirar y frotarse la naricita
            con ambas manos, con ambas
            orejas hacia abajo. chasquear
            la lengua.    ¿te gustó? no digas
            bobadas, no hice nada particular.
            solo te gusta mi rostro.

¡a-a nadie! aunque de todas formas yo soy más alto que un niño, mucho más— ¿qué te parece tan divertido, vampiro? sí, parece ser que te gusta mucho más que a mi, por alguna razón que no termino de comprender; aunque no puedo culparte, tengo que admitir que tu apariencia llama mi atención. luces... diferente. mi sangre no ha de ser tan dulce como parece, estoy maldito. ¿ah, sí? entonces estaré muy atento a ti, a ver si cumples con tu palabra. /bufar, fijarse en sus colmillos y reparar en su sonrisa. humedecerse los labios en respuesta, con la cola yendo de un lado a otro, ciertamente entretenido.    entonces esfuérzate mucho. /sonreír, alzando las orejas un poco para escuchar mejor su gruñido. ladear cabeza.    ¿luce bien? es porque parece suave ¿no? paso mucho tiempo desenredándome el pelaje, deberías de hacerlo tú por mi si quieres tocarlo. /guardar silencio y tragar saliva, bajar brevemente la mirada junto al contrario para intentar seguir el trayecto que tomaba. erguirse casi por completo y hacer las orejas hacia atrás; observarlo con ojos totalmente abiertos y lo que parecía ser un ligero rubor en su rostro. removerse y llevar una mano a la ajena.    ahí me harías aún más cosquillas, y mis muslos— ¿no te verías ahí muy indefenso? siempre puedo patearte, si no llego a morderte. /pestañear un par de veces y observar sus gestos, chasquear la lengua.   ¿"ven aquí"? ni que fuera un perro, te costará un poco más amaestrarme... pero, tomo mi oportunidad. /acercarse un poco más a él y olfatear, observándolo fijamente desde abajo.    yuumidai. ese es mi nombre, llámame como quieras. /tomarlo de la ropa y bajarlo un poco a él.   mírame desde aquí, a mi misma altura.

eso es porque tú eres más alto de lo normal, pero si no te usas a ti mismo de referencia— ¡no soy tan pequeño! sí, esta forma semi-humana es muy molesta, aunque ya he aprendido un poco a controlarla. a—además, no he dicho que sea bonita, solo.. solo parece que por alguna razón me hace ver más "tierno". eres un vampiro ¿cierto? nunca había tenido el placer o la desgracia de encontrarme con uno. /gruñir un poco en reacción a su acción y alzar la mirada a él, ciertamente nervioso ante su cercanía. mover una orejita y apreciar la fisionomía contraria.    primero tendrías que conseguir tocarlas, y luego veremos si me emociono o no. de todas formas es muy vergonzoso que toquen mis orejas, mi pelaje es un poco difícil de mantener. /mascullar, estremeciéndose ligeramente al notar el trayecto de su índice. cerrar ojos brevemente y apretar los labios, resoplar.    me haces cosquillas ¿no tienes otro sitio de donde tomar la sangre? si te atreves a "morderme por ahí" yo pienso devolvértelo, y mis caninos han de ser más fuertes que tus colmillos. /susurrar, como si fuera un secreto entre ambos. carraspear.    sí, tus ojos son de un color bonito, pero no te emociones demasiado por eso. ¿cuál es tu nombre?

y con lo de "te ves igual de pequeño que yo" quiero decir que tienes un rostro bonito.