‹ ִֶָ ࣪ ៹ ☄️ Tiene al rededor de cinco minutos para llamar a su agente y decirle que lo pensó y sí quiere el seguro... —añadió, bufó y cambió de arma. —Necesitamos movernos... Rápido.
»Refuerzos en camino... Conexión en tres, dos uno.
—Establece un perímetro de cuatro metros después de los límites de la propiedad, en breve tendrás vídeos de cámaras de seguridad en toda la zona desde las cinco am, hasta este momento para el monitoreo... —explicó mientras sacaba a la mujer de la habitación y cerraba con cuidado, mirando a todas partes. —Habían cuatro sujetos de género masculino, no tienen gran capacidad de armamento, pero sus equipos tecnológicos sí... Opera sin celular y radio de baja recepción...
—¿Son órdenes del Cap?
—Con un demonio... Baratheon ha de estar dormido. —aseguró y bufó al oírlo protestar, cruzó hacia la derecha al final y en el pequeño cuarto de servicio se metió con ella detrás. —Esto es lo que haremos, Señora... —aseguró frente a ella, de espaldas a la estantería, mientras preparaba el arma. —Va a darme el permiso de actuar... No se asuste, si se acerca un poco, la van a escuchar... —mal momento para hacer chistes, pero era Zelda, y con una bala entre los dientes y el teléfono metido en el brassier para desocuparse las manos, se quitó la camisa, quedando en la musculosa blanca que llevaba debajo. —No, sea tímida... Le puede costar la vida... Literalmente.