El vacío se apodero de su carne, su alma en una profunda oscuridad, solo, sin nadie a su lado, los ojos secos por las largas horas incontables de llanto, mirando a la nada, mirando a la oscuridad, abriendo sus manos para dar ese último abrazo, renunciando a todo y solo sintiendo el golpe ligero del aire, se desploma y todo se torna oscuro, alma en profunda oscuridad, solo, sin nadie a su lado.