soltó una carcajada al escuchar lo del mate dulce con "aditivos extra", agitando la cabeza con una mezcla de diversión e incredulidad.
──── ¡¿mate con drogas?! ¡pero mirá vos, eso sí que es una anécdota! ── rió, dándole una palmada ligera en el hombro al otro, como si lo conociera de toda la vida ──── pero quedate tranquilo, acá no hay nada raro, solo yerba buena, del tipo que te deja bien despierto.
ya viste, aunque de vez en cuando alguno te manda algo raro y no te avisa ¡pero no hoy! hoy venís con suerte.
le guiñó un ojo, ofreciéndole el mate ya cebado mientras sonreía complacido de poder encontrar gente suya en el lugar
──── ah, y no te preocupes por no haber traído el tuyo, con un mate compartido se arregla todo, ¿no? además, dicen que compartir el mate une, y mirá, no sé si es verdad, pero yo me arriesgaría a comprobar ¿que decís?