Cuando la conocí, tenía energía, fuerza y pasión. Cuando la conocí decidí que valía la pena. Se enamoró de mi primo y me hicieron feliz. Hoy mi primo descansa en el cielo y ella muere lentamente.
Lo lindo es, que no importa que pase, estuve con ellos en los peores momentos, esos momentos que me demostraron que eran humanos y que si ellos podían amar tanto, entonces este mundo aun tenia reme dio.