El 3 de abril de 1922 Stalin fue nombrado Secretario General del Partido Comunista de la Unión Soviética y Lenin lo había nombrado como Jefe de Inspección de los Trabajadores y Campesinos. Al consolidar gradualmente su influencia y aislar o limitar a sus rivales dentro del partido, Stalin se convirtió en el principal dirigente soviético. En octubre de 1927, Grigori Zinóviev y León Trotsky fueron expulsados del Comité Central y obligados a exiliarse.
En 1928, Stalin introdujo el Primer Plan Quinquenal destinado a construir una economía socialista. Esto, a diferencia del internacionalismo proletario expresado por Lenin y Trotsky a través del curso de la Revolución, apuntó al socialismo en un solo país. En la industria, el Estado asumió el control de todas las empresas existentes y emprendió un programa intensivo de industrialización y en la agricultura fueron establecidas las granjas colectivas (koljós) por todas partes en el país.