Se que debería disfrutar este lugar, debería estar tocando la lira, corriendo por el campo, pero no puedo.
Solo puedo gritar tu nombre:
"Patroclo"
Dónde estás? Cuánto tiempo ha pasado? Acaso tú alma no ha encontrado descanso?
No cumplieron mi petición de enterrarnos juntos?
Patroclo, mi amado Patroclo, por favor ven. La muerte era mi consuelo pues podría estar contigo por la eternidad y ahora estoy solo, buscándote y gritando tu nombré
-Aquiles