De ti, esa personita aprendió mucho (y gracias a otras personas a las que no les va a quitar parte del mérito que se merecen) aprendió a reír, a que no hay que tomarse tan enserio las cosas, que hacer tonterías está bien, que es demasiado joven para tener una cara larga, que uno puede caer pero debe levantarse y continuar y aunque vaya tan alto que pueda rozar el cielo con los dedos siempre puede volver a caer pero que no importa que tan fuerte sea la caída, solo hay que levantarse y seguir, aprendió un nuevo tipo de droga de la cual no sabía y el efecto más permanente fue un vocabulario mexicano que fue perdiendo a causa de críticas pero que todavía conserva en su repertorio.