Bueno, voy a contestarte aquí porque no encuentro el puto comentario.
Eso depende; por ejemplo, tu inodoro. Lo necesitas para orinar y defecar, pero ¿Realmente lo aprecias? ¿Realmente despiertas cada día pensando: «Ay, qué feliz estoy junto a mi inodoro»? No, porque sabes que si por alguna razón este dejara de andar o se rompiera, podrías comprar otro igual o mejor.
Evan necesita a Jules para ser feliz, para que lo salve. Porque no puede salvarse a si mismo. Pero la verdad es que no podemos esperar que alguien venga y nos salve, porque jamás pasará. Y, aunque Evan no lo hace a propósito, está utilizando a Jules, utilizando su vitalidad y felicidad, para lograr que se le pegue un poco. Está chupando poco a poco de sus venas la vida y la alegría (por decirlo de una forma literaria).
Tenemos que aprender a salvarnos a nosotros mismos, porque en algún momento esa persona que "supuestamente" nos salvó, se irá, y volveremos a estar al borde de la desesperanza y del miedo. Sé que es difícil superar, un trauma—más como el de Evan—, lleva tiempo, y a veces hasta ni siquiera lo logras del todo. Pero la vida muchas veces nos golpea en la cara, y nos deja lastimados, con ganas de que alguien nos ayude. Pero luego te darás cuenta que ese alguien somos nosotros mismos.
Evan debe aprender que a veces nosotros mismos somos la luz al final del túnel. Cuando él sepa eso, será el momento el que, al fin, podrá estar con Jules.