Escape from Tarkov se desarrolla en la ficticia región de Norvinsk en el noroeste de Rusia, alrededor de una "zona económica especial" que sirvió como puerta de entrada entre Rusia y la Unión Europea. Sin embargo, esto atrajo a corporaciones con intenciones dudosas, y la ciudad de Tarkov se convirtió en el centro de un importante escándalo político que involucraba a corporaciones corruptas en la región de Norvinsk. Seis meses después, la situación estalló en un conflicto armado que involucró a las Tropas Internas de Rusia, las fuerzas de paz de las Naciones Unidas y dos compañías militares privadas: United Security (USEC) y Battle Encounter Assault Regiment (BEAR). Las fronteras de la región de Norvinsk se sellaron y aquellos atrapados en medio de la guerra local fueron aislados del mundo exterior. USEC fue contratada por el TerraGroup, una de las corporaciones corruptas involucradas en el escándalo, para obstaculizar las investigaciones durante el conflicto, mientras que BEAR fue contratada por el gobierno ruso para descubrir evidencia que demuestre las actividades ilícitas del TerraGroup.