Con el estómago vuelto un puñado de nervios vengo a tomarme el atrevimiento de dejarte una pequeña explicación sobre algo que ya no logro controlar, ha sobrepasado los límites mentales que me he puesto a mí mismo, y mi corazón ya no puede mantener en secreto este sentir tan intenso hacia ti. La verdad es que estoy enloquecido de amor por ti, Zack, me resulta muy difícil disimularlo cuando la verdad es que pasamos todo el día hablando y compartiendo tiempo juntos. Te conozco mas que a nadie aquí y tú a mí, ¿cómo pude no darme cuenta antes que el dueño de mi corazón eras tú? La respuesta es simple: nuestra amistad. Veces anteriores que me sentí tentado a confesarte mi amor tuve que ponerle una barrera a mi corazón por el hecho de que no quería perderte en caso de que las cosas pudieran salir mal, pero llegué a este punto en que tanta espera por el momento indicado y una señal que me de la luz verde me tienen estallando en emociones. Deseo tanto que seas mío y yo ser tuyo, quiero ser yo el dueño de tu corazón. El universo se tomó su tiempo para darnos el momento ideal y no quisiera desperdiciarlo quedándome callado sobre esto. Me gustas, Zack, me gustas con locura. Estoy muy seguro de que solo yo podría cuidar de ti como se debe, no tolero verte con otras personas. No puedo soportarlo mas, te quiero para mí. Permíteme tomarme el tiempo y los cuidados debidos para ser yo ese amor que tanto buscas (si esto que te confieso es mutuo). Te amo, te amo con todo mi corazón.
