Estaba checando mi correo hace unas horas cuando de la nada recordé que hoy se cumplía un año de la historia Washing Machine Heart, es curioso, en ese escrito que hice una madrugada llorando a mares porque me sentía que podía morirme de la pena que tenía rogué e imploré por dejar de sentirme así.
Sorprendentemente, al dejar caer todo mi corazón en ese escrito mejoré. Mejoré tanto que mis sueños dejaron de ser molestos, dejé de llorar al despertar, dejé de necesitar un simple mensaje, dejé de hablar con esta persona.
Lo dejé. Y mis sueños lo hicieron también.
Uno en particular simplemente fue de él pidiendo mi ayuda y yo diciendo que no podía. Esa fue la última vez que lo soñé.
Estoy feliz, estoy prosperando y estoy conociendo gente nueva. Creo que eso es avance, y creo que no lo hubiera logrado nunca de no haber exteriorizado esa pena que llevé durante cuatro años.
Se siente bien ser libre.