Soy el que soy: Cantante de ducha, lector, desde que tengo memoria, escritor obate, cinéfilo , melómano, amante polígamo, esposo, cocinero, hijo, hermano, tío, primo, sobrino, nieto, consejero de closet, amigo.



Me gusta conservar  mi capacidad de sorpresa, creo que es indispensable para supervivir en el este mundo de tres dimensiones.



Amo el café bien caliente, con el perfecto balance de dulzura y amargura; amo el buen chocolate, en cualquier presentación; amo el libro que me atrapa al punto de no poder soltarlo, de no querer soltarlo; amo la música que me causa emociones, que guarda belleza en sus acordes y sus letras; amo los aromas y los sabores que se pueden transmutar en una cocina; amo mi lado oscuro; amo al que ama y que se deja amar; amo los días de lluvia, aún me den sueño; amo mi día de cumpleaños, es simplemente perfecto; amo el invierno, el verano, la primavera y el otoño, en ese orden; amo dormir; amo una buena charla, de esas que alimentan el intelecto pero que, sobre todo, alimentan al alma; amo la película que me deja con dudas, pensándola durante mucho tiempo, también aquella que me adentra en un mar de sentimientos, que me arranque lagrimas desde lo mas profundo o carcajadas a mandíbula batiente; amo amar y ser amado.



Nuevo en el mundo de los escritores, soñando con algún día, ojalá no muy lejano, pueda ser reconocido como tal.



Me considero perfeccionista en cuanto a escribir se refiere, por lo que suelo tardar bastante en auto aprobar algo para compartir.



Agradezco los comentarios de retroalimentación que me permitan continuar mejorando; de modo que si tienes uno, no te ates la lengua y dímelo como va.