—¡S-Seiya, te tengo un regalo~! —Extendió hacia él un collar de cuero con un dije cuadrado de madera.—Mira, mira~ —Habló con tono infantil, empujando la madera con uno de sus dedos, mostrándole que ésta podía girar con facilidad. Uno de los lados tenía tallada una luna y estrellas, y el otro un sol lleno de ondas.—Yo digo que se parece a ti; igual de duro, igual de necio, y con muchas posibilidades. Y diferente, claro, tan bipolar como tú.