en el estrellado cielo, siendo quebrados por el fragor de un rayo vi como se nublada extendiéndose a grisáceos sus lados y de eso, abriéndose la torrente de agua que me bañaron en cuerpo y alma sin descanso alguno. sentí en ello tu sensación, lo que provoque en ti por mi ausencia, si un perdón no sirve ténme ante ti con un suspiro de que para mí, no estar junto a ti, era más que una tortura.