⠀⠀⠀❦ ᳜⠞⁺⠀y si en algo peca, es en ésa piedad pon-
⠀⠀⠀zoñosa que, sin redimir, retiene: clemencia que
⠀⠀⠀no salva, sino que demora el suplicio con la ter-
⠀⠀⠀nura de un carcelero piadoso. L̲a̲ m̲i̲s̲e̲r̲i̲c̲o̲r̲d̲i̲a̲.
⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ྀྀིε ❤︎ зྀི *⠀⠀⠀.⠀⊹
⠀clémence, policía de cargo: desde su ojeriza al reo, deslíase en mórbida querencia, pues tanto aborrecía al delincuente que su sola existencia le urgía a poseerlo, a doblegarlo; y así el repudio, sin cauce, fermentaba en morbo: deleite en la rigidez impuesta, en la crispación del músculo rendido, en la carne sujeta al yugo como prueba de su dominio, en la temblorosa entrega que el castigo le concedía bajo el peso de la ley por ella custodiado. y si alguna vez le asomaba la culpa, no era por él, sino por cuán honda y dulcemente se reconocía en aquello que decía combatir.
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⠀neriah, aquella inadvertida por el otro, la creen nueva acá y allá. sin que mediase fortuna ni afección alguna, encarnósele el espanto por hálito: no lo aprendió, mas se le insufló al ser suscitada al mundo: afección primera, ignota de causa, anterior a todo logos o principio. no nace ni concluye, pues no deviene: sólo perdura. inane de figura y exento de término, le pauta el aliento, le disciplina el ademán y le reglamenta el querer, conforme al viejo axioma: «a quien no teme, no permanece». así, ha evocado el afecto en el miedo, tanto del prójimo como de sí.