dxntstopmenow
la japonesa iba vestida felizmente con un kimono morado con flores negras y su cabello recogido en una sola trenza, un maquillaje muy ligero, bastante al natural podríamos decir, esta es mio hanako (se llama hanako, aunque algunos americanos que no comprenden la función de los nombres asiáticos la llaman mio, dato irrelevante pero real) y con esto en mente podríamos decir que hana debe estar harta de ser confundida, pero... más harta está del odio, constantemente maltratada al ser la única asiática de queen, sí, la banda de freddie mercury justamente, en fin.
mientras caminaba, a lo lejos nota a un tipo... bastante bonito, pero le suena de algo, principalmente sus ojos, por lo cual decide sacarse la duda y acercarse a este.
— uh... señor. — llama, formando una muy pequeña reverencia. — ¿ es usted... ace frehley e-el guitarrista de kiss, por casualidad ? — pregunta en un tono bastante tímido, suave, esperando no haberse equivocado con aquella persona, sería muy vergonzoso si así fuera, pues lo vio una vez, pero... luego de eso nunca más lo vio.
// ola owo
aceloveshana
@dxntstopmenow # VENGO CIEN AÑOS TARDE PERDON Si era sincero, dudaba... En verdad dudaba si estaba siendo un buen ejemplo para su hija, si en verdad tenía el derecho de ser llamado padre y serlo. Literalmente era un drogadicto, alguien que luchaba constantemente con querer dejarlo pero que simplemente no podía hacerlo... O eso creía. Y todas estas dudas se formaron porque alguien le había recordado que tenía una hija y que eso no era bueno para ella... Pero de una manera un poco cuestionable a decir verdad. Era un desastre y nisiquiera entendía porque lo habían llamado a él para un programa donde literalmente querían dar un mensaje anti drogas. Sentía vergüenza, le daba vergüenza admitir que tenía un problema... Y eso se vio en aquella entrevista de la que ahora había salido. Estaba un tanto pensativo, preocupado y quizás triste por... La suerte que le tuvo que tocar a su niña, no... Ella merecía algo mejor. En fin, de un momento a otro siente que alguien lo llama, a lo que voltea y logra notar... A esa mujer de rasgos asiáticos... Ella le recordaba a alguien, pero no podía recordar a quien y tampoco su nombre. La mujer pregunta aquello, él sólo asiente amablemente. — El mismo Spaceman en persona, señorita. — asintió levemente, viendo aquella reverencia e imitandola por instinto. — Aunque... No sé si ya lo sabía, pero dejé Kiss hace un par de años. — explicó, acomodando su cabello un poco. — Y no es necesario que me diga señor, señorita... Yo, sé que estoy más mayor... Pero no tanto. — suspiró.
