aunque el tiempo ha marchado por dieciséis años, la ausencia de Michael sigue sintiéndose tan profunda como el primer día. parece mentira que ya haya pasado tanto tiempo desde que su voz se apagó, pero al mismo tiempo, su música y el impacto que tuvo en mi vida siguen siendo tan vívidos como si fuera ayer.
lo extraño cada día. extraño su talento, su carisma, la forma en que su música podía transportarme y tocar mi alma. extraño la promesa de más canciones, de más momentos que nunca llegaron. su arte fue un regalo, y aunque su presencia física ya no esté, el legado de su música es una compañía constante, una melodía que resuena en el silencio.
mi amor por él es algo que el tiempo no ha podido desvanecer, ni siquiera un poco. es un amor que va más allá de lo terrenal, un amor que sigue vivo en cada acorde de sus canciones, en cada recuerdo que me trae a la mente. no es solo la nostalgia de lo que fue, sino la certeza de que su influencia es eterna. su música trascendió la vida, y así también lo hizo el amor y la admiración que siento por él.
es un amor que no conoce fin. es eterno, como la huella que dejó en el mundo con su voz y su corazón. siempre te amaré, Applehead.
Siempre te amaremos, Michael. ❤️