Intentamos sobrevivir a los días, los días se convierten en rutinas y nuestros sueños, metas y esperanzas dejan de ser importantes y se vuelven eso, solo sueños, solo imaginación, aún así nos vamos a dormir esperando que el día siguiente cambie y que el fuego que una ves nos hizo sentir vivos vuelva a prender, pero no lo hace y dejamos de vivir con esa luz para volvernos una sombra, porque al final no puedes estar seguro de nada, hay una serie de factores invisibles que se combinan para producir un resultado impredecible pero inevitable. Al final la ignorancia es la que trae caos, no el conocimiento o la evolución.