Es noviembre del 2024 y tengo tantas cosas que contarte, tantas anécdotas nuevas y personas que amaría que conozcas.. te extraño, te siento adentro, en el pecho, como algo cálido y constante. Ojalá nunca habernos alejado de esta manera amor, nos debíamos tanto mi nunno, mi rayo de sol. Algún día espero poder cruzarme con tus ojos marrones y tus labios sedosos, con tu risa estruendosa y sonrisa que iluminaba cada mal día, por más doloroso o triste que fuere.
En esta vida no se pudo mi muchacho con destellos de ninfula, mi amor de hombros delicados y manos suaves, mi más íntimo amante, para siempre.. en otra vida será