͝⏝͜ㅤㅤㅤㅤ⏜ㅤׅ ㅤ᪾﷼ׁׅ᷼᷼᷼ㅤㅤㅤ Los días libres sonaban como algo lejano, algo con lo cuál nunca sería capaz de recompensar a su propia persona, no porque no mereciera un descanso o siquiera un respiro de aire fresco. Para una mente tan llena de caos como la de Li Su, su manera de mantenerse al margen era ocupándose hasta el cansancio, hasta entumecer sus extremidades con entrenamiento o con el dolor punzante en sus piernas por ir de un lado a otro a la velocidad de la luz.
Era incluso liberador si le permitían ser sincero, pero claro, nunca antes se fijarían más allá en él porque si bien lograba mantener un buen número en el rango del top 10 de los mejores héroes; no es que fuera gran cosa fuera de eso por su falta de ¿Carisma? ¿Emoción? Nunca lo vió como un problema hasta que los mismos medios hicieron mención de ello.
Se encontraba patrullando los alrededores de la ciudad, apreciando entre su quietud de lo tan estruendoso que llegaba a ser la vida en constante movimiento. No fue hasta que cierta voz a la distancia por detrás le hace voltear con cautela, la suficiente como para prácticamente ser "atacado" con los mordiscos y ladridos de un canino; parpadeando por unos instantes, una sonrisa ladina se pinta sobre sus labios. Estaba a punto de agacharse a la par de este cuando en su campo de visión se posó su dueño.
Su corazón se detuvo en ese instante.
Era él.
Hacía tiempo que ya no lo veía y se preguntaba cómo habría estado.