anoche estaba algo cansado así que no respondí—. tuve un buen día, podría decirse, aunque andaba con mucha pereza. de todas formas, pude dormir perfectamente. ahora dime, ¿cómo estás tú? ¿comiste y tomaste agua ya?
llegué demasiado nervioso . . . no recuerdo si te conté. a mí sólo me dolió apenitas el pinchazo, pero fue menos de lo que esperaba, y el enfermero hizo que la cosa fuera más agradable de recordar. no fue bruto, incluso su habla fue tierna y eso bajó mi ansiedad.