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Permaneció en silencio, mientras que el muchacho se consumía en la breve lectura. En su cabeza no dejaba de tararear una canción que no recordaba cuándo había escuchado, e iba intercalando el peso de su cuerpo entre una pierna y otro. No tardó en enfocarse en el ajeno, en cuanto éste le habló.── ¿Cuándo es..?── susurró, sonriendo un poquito más, mientras le sacaba el folleto con gestos morigerados. Lo examinó de pies a cabeza para después tirarlo al suelo y pisarlo con fuerza.── Esos malditos estúpidos no saben hacer nada bien── murmuró para ella misma, antes de recobrar su actitud anterior, sacar un nuevo folleto de su bolso y escribir en él la fecha y hora, con un bolígrafo.── Espero verte el martes── bisbiseó, tomando el papel machucado en el suelo, de la forma más disimulada que pudo.

@honeyholy 
            
            Siguió los movimientos confianzudos de la muchacha, sonriendo ligeramente por la curiosa situación en la que se encontraba. 
            — Oh, ¿ok? —Entre el cumplido que había creído entender al inicio y la repentina invitación al evento, se debatió entre intentar hablar con la castaña y leer el folleto. Eligió lo segundo. 
            
            Tras unos segundos de haberle echado el ojo, creyó entender un poco mejor, sólo le quedaba una duda—. Y… ¿esto es cuándo? —Le interrogó, buscando entre las palabras del folleto las dichosas fecha y hora. 

@badafrodita 
            
            La introducción de la chica le tomó desprevenido, pero aún así le sonrió levemente, procesando sus palabras. 
            — ¡Hola! Yo, uhm… ¿puedes repetir lo último un poco más lento? —Por un segundo, había considerado la idea de improvisar, pero no había entendido más de dos palabras de la última frase de parte de la desconocida y no quería quedar más en ridículo de lo posible.