Me apetece dejar por escrito como empezó mi verdadera afición por la lectura. Cuando digo "verdadera", me refiero a ser una ávida lectora y disfrutar todo lo que tiene que ver con el mundo del libro. Sé que el uso de palabras tan absolutas como "verdadero" en este contexto me puede dejar a ojos de alguien como una engreída... Sin embargo, considero que mi amor por la literatura es vasto y con esto ya me sirvo de mi propia verdad. Así que sí, mi amor por la lectura es verdadero, certero, inagotable pero sobre todo sincero.
Me gusta leer, por supuesto, pero también estar informada de las novedades editoriales, entrar en la librería que queda cerca de mi facultad, ir atesorando mi propia colección, hacer mis reseñas en goodreads, hablar de mis libros favoritos con otras personas y ¡muchas cosas más! Realmente aldededor de los libros he llegado a crear un espacio seguro increíble que aún a día de hoy sigue reconfortándome en mis peores momentos.
¿Cómo empezó todo esto? Durante la secundaria y bachillerato no fui una gran lectora. De hecho, recuerdo que el año en que cumplí mis diecisiete años no me pude terminar ni un libro al completo. Me aburría la lectura y, aunque me gustaba conocer sobre literatura, cuando llegaba el momento de pasar páginas y avanzar siempre encontraba mejores cosas que hacer. Además, supongo que el hecho de que toda mi ESO la pasé siendo una gran aficionada a los cómics tampoco supuso un aliciente para pasar del dibujo a la letra.
Sin embargo, todo cambió gracias a Namjoon... No es broma, me explico.
(Dejo la explicación para otro día, que estoy cansada) JAJAJ