no hay nada que me deprimiría más que el hecho de, en un par de años, observar mi vida y darme cuenta de que no he hecho otra cosa que ser como el resto de las personas, teniendo un trabajo que les disgusta y los sume en el estrés, con tantos sueños y metas pendientes, llevando una vida tediosa y rutinaria, preocupándose siempre por el dinero del que disponen.