Reflejar una parte de mi personalidad en mis personajes es solo una pequeña parte de todo lo que hago cuando oprimo alguna tecla del ordenador.

Mas allá de mi cabeza hay un mundo en donde lo opuesto a la felicidad y ternura vive.

La lujuria, la obsesión, el dolor y la venganza se hacen realidad en las letras que escribo.

Cada personaje mío lo siente e inevitablemente se deja quemar en las llamas de la oscuridad.

Cualquiera que dijera que la lujuria, la obsesión, el dolor y la venganza no era buena, era solo porque nunca la había probado.

¡Bienvenidos!


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"Para mí, el mayor placer de la escritura no es el tema que se trate, sino la música que hacen las palabras."