"- Envidio a las personas que siempre muestran lo que sienten, las personas que son tan puras que sabes lo que piensan solo con verlas, las que son gentiles, amables y cariñosas con todo el mundo sin esperar nada a cambio, simplemente les nace ser así. 

Vivo con una. Todo el tiempo es considerada con los demás, aunque a ella la lastimen, aunque le hagan daño, ella no es capaz de hacerlo de vuelta. No es tonta, no se queda en el lugar donde la hirieron, pero tampoco va a quedar con rencor, sabe seguir adelante con una mente limpia de que hizo lo mejor que pudo.

No he logrado ser así, cada vez que trato de serlo me lastiman de formas que no creo merecer, no puedo explicar el motivo por el que siempre termino con tanto dolor. Lo único que sé es que cada vez me alejo más de ser esa persona que veo a diario pero, lo que verdaderamente siento, es como si buscara una salida de una habitación que no tiene puertas y, cuando por fin veo una pequeña luz, viene alguien y la cubre con cemento.

Soy una hipócrita, me trato de ver como esa persona pura pero soy todo lo contrario. Reprimir mis sentimientos es lo que me ha hecho seguir adelante, pensado que algún día podré salir de ese oscuro lugar. Anhelo que venga alguien a salvarme y me muestre que no tengo que ser así, que me va a apoyar para ser lo que quiero ser sin miedo a salir herida otra vez. - Finalizó diciendo con lágrimas en los ojos.

Me gusta cuando las personas se desahogan conmigo porque nunca ha habido una persona con la que yo me haya podido desahogar completamente, todo lo he logrado guardar dentro de mí por mucho tiempo. No estoy pidiendo ayuda, solo que todavía no me he muerto completamente en mi interior como para pedirle a alguien que me rescate. Por ahora me siento bien apoyando a las personas que confían en mí  para que nunca tengan que guardarse todo.

- Sálvame, por favor. 

- No te preocupes, yo te voy a salvar."

Espero poder salvarte de tu propia habitación oscura, como si me tratara de salvar a mí.