Un alma rota.

Un alma rota se forma por la pérdida de un ser querido, maltrato psicológico y moral, una enfermedad incurable, etc.
Cuando un alma está dolida, no hay quien la cure; es como una flor a la que cruelmente le arrancan sus pétalos, como una lágrima derramada que ya no puede retroceder por el camino donde vino, es como una melodía triste, que aunque pase el tiempo no se puede alegrar, es como una niña que llora sola y en silencio en su habitación, esperando que ese ser querido vuelva, esperando que el maltrato pare, esperando que su enfermedad se valla sola, aunque no valla a pasar.