¡Nueva noticia! Hace tiempo escribí una historia de ángeles y demonios (ya saben, lo típico), y que la borré al poco tiempo, porque eso que le da a uno cuando relee sus historias antiguas fue muy fuerte. Esa tilde mal colocada, ese hueco en la trama, esa frase que en mi cabeza sonaba perfecta, pero escrita no era ni la mitad de buena... En fin. No lo soporté y mantuve dicha obra en borrador "hasta el día que la editara". Pasaron dos años, y ni un punto le corregí xD Pero ¡decidí publicarla otra vez! ¿Cómo pasó esto? Bueno, no fue fácil. Cada vez que me asomaba a responder nuevos comentarios, mis ojos se desviaban a esa pésima ortografía, a esa palabra que, ahora que no tengo 12 años, me resulta inmadura y hasta ofensiva, a ese error que debería ser pagado con pena de muerte por tal sacrilegio a la lengua española... Ya entienden. Cada vez me convencía más de que mis trabajos necesitaban una edición URGENTE, pero no sabía por dónde empezar, así que busqué consejos de escritura, hice mis apuntes, ¡ya estaba lista para desvelarme corrigiendo!.. Y encontré un tip resaltante: no te estreses por editar. Este librito decía que hasta los escritores profesionales sienten cierto recelo hacia sus primeros escritos, y que ninguno considera su primer borrador medianamente bueno. Así que me animé. Si no escribo ahora, ¿cuándo? Ya tendré tiempo para editar más tarde, ¿cierto? Además, apuesto que en dos años voy a leer alguno de mis escritos actuales y me van a entrar las arcadas xD Por otro lado, sueño con que (en algún futuro lejano) haya personas que se sientan inspiradas con lo que hago. Entonces, verán mis primeros escritos, y, en vez de desanimarse porque sus novelas no tienen cierta calidad, se llenarán de esperanza, porque podrán presenciar que todos empezamos de cero.
Espero que alguien se haya animado a seguir escribiendo en lugar de estresarse por editar una sola historia. Hay que amar el proceso, ¿no? ;)
-Effy.