Años en los que tuve razones para escribir y ojos que me leían, ahora necesito curarme el alma, allí encontré las ganas.

El amor es como el invierno, para mi fortuna, mi sangre aún hierve por mis venas al acariciar un libro, disfrutar de un día soleado o saborear una galleta de helado.

Tengo partes del alma congeladas y otras en llamas, cuando se juntan, la catarsis hace eco en mi vida.
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Story by Ilegal
Saudade by gaap127
Saudade
Los finos hilos del pensamiento a veces se vuelven una madeja, cuando la muerte rozó su cara y sintió su frío...