--Callate, sólo un momento. --
Repitió Roberto más serio pero también más bajito.
Estaba bastante cerca de ti, de hecho, la distancia entre ustedes se estaba reduciendo cada vez más y más. Roberto pasó su mano derecha de tu mandíbula a tu cuello y pasó a acariciar éste, también de manera suave. Su mano izquierda se movió de la cadera a la entrepierna.
CON PERMISOOO ME VOY A PAJEARRR