Me volví a releer Enchanted y encontré algunos errores, pero eso no impidió que volviera a sentirme triste como la primera vez que la leí completa en borradores. De tanto haberla revisado, pensé que ya no volvería a sentir tristeza porque sabía el final, pero después de un tiempo lo olvidé y volví a tener la misma sensación hoy mientras leía.
Es una historia que escribí en un momento difícil de mi vida, y en realidad, básicamente escribirla y desahogar parte de mis emociones y pensamientos en ella me ayudó mucho.
Es muy importante para mí, así que agradezco siempre que una persona la lee.