El dominio celestial está a las puertas de una guerra interna llevada por rebeldes de una especie "esclavizada".
Esos rebeldes durante años llevaban reproduciéndose en secreto en varios planetas del dominio aumentando sus números para su causa.
El dominio celestial tiene que ocuparse de ese problema mientras intenta tener relaciones con las civilizaciones y facciones locales de la galaxia de Andrómeda, esto podría hacer que el dominio sobrepase sus ahora limitadas acciones de intimidación y despliegue de activos militares.
Posiblemente nuevos y viejos enemigos intenten aprovechar esa difícil situación del dominio