te amo mucho —dice un poco más relajado, pero llorando un poquito, aferrándose de él fuertemente con sus dos manitas. deja dos besitos en su cuello, luego lo mira haciendo un puchero— h-hwa, sé que es algo raro que te lo pida ahora p-pero, no sé, quiero a-algo... —se tapa la cara, sintiendo la sangre subírsele a la cabeza— m-me da vergüenza decirlo