Ayer tenía mucho sueño en el trabajo entre bostezo y lagrimeo me quedé mirando a la nada derrepente una muchacha se levantó de su lugar y me reclamo que le veía. Mi mente dañada por el yaoi reaccionó y le dije
Te vez más bonita de cerca.
La muchacha me sonrió, se sonrojo y se fue a su lugar.
Evite una discusión, evite un problema y evite una posible pelea y la hice sentir bien.
Lo curioso es que hoy no deja de mirarme.
Moraleja todas llevamos una lesbiana dentro solo falta apoyarlas.