¡Hola!
Me siento un poco avergonzada de volver después de no haber publicado nada por meses. Sin embargo, este es mi lugar seguro, uno de tantos que tengo. Muchas veces me alentaron a hablar de lo que me pasa sin miedo, y quisiera compartir un par de cositas.
Esto no es a modo de excusa por haberme ausentado, sino para que se comprenda y para tomar dimensión de lo importante que es intentar estar bien... que es un tema que traté en un par de historias.
El año pasado toqué fondo. Ya venía luchando con el tema de la salud mental, creí que podría hacerlo sola, pero ese malestar me afectó en los estudios, en el trabajo, en mi familia, mis amistades e incluso mis pasatiempos. Explotó todo como una bomba que afectó todo a su alrededor y no tuve más remedio que buscar ayuda. Me alegra decir que hoy me siento bien de verdad. Hay que seguir mejorando, pero veo todo diferente, bajo una mejor luz. La psicóloga me derivó a psiquiatría y, entre ambas, lograron que pueda estabilizarme. Comencé en julio del año pasado y todavía continúo. De a poco estoy retomando mis pasatiempos. El mes pasado logré volver a leer un libro, cosa que no hacía hacía años, y volví a tener ideas para mis historias; estas surgieron sin presión de pensar si sería lo suficientemente bueno para ser publicado, simplemente imaginé la trama por el simple placer de hacerlo.
No digo que voy a volver a publicar muy seguido, como hacía hace años, pero sí con más frecuencia. Esta semana va a haber algún capítulo nuevo y alguna que otra historia nueva en el año. También contemplé la idea de publicar en físico alguna de mis historias, pero eso es algo que todavía no me atrevo a hacer. Todo a su tiempo.
En fin, si llegaron hasta acá, gracias por haber leído y, sobre todo, por seguir acá. En cuanto pueda, voy a volver y ofrecer historias que espero sigan disfrutando.
Les mando, como siempre, un abrazo enorme. Sepan que los quiero mucho.
Caro ♡