Aquí les dejo una parte de lo que publique hoy en blogger:
No dejes que toda tu vida se convierta en una lista de tareas que “debes” completar sí o sí. Porque, al final, perderás la motivación, la energía... lo perderás todo, y volverás al punto de inicio.
Así que, cuando quieras lograr algo, no pienses solo en lo mucho que debes hacer o en cuán productivo necesitas ser para alcanzar esa meta. Recuerda que todo tiene un límite.
Está mal posponerlo todo, no hacer nada, no esforzarse. Pero también está mal exigirte tanto que termines haciéndote daño en el intento de cumplir con todo.
Si sientes que incluso tus hobbies se están convirtiendo en tareas que debes completar solo para poder decir: “fui productivo”, entonces tómate un descanso. Respira. Piensa. Y dite a ti mismo: “No siempre debo ser productivo.”
En lugar de usar esa energía para demostrar productividad, úsala para disfrutar tus proyectos. Y recuerda: está bien descansar, está bien fallar a veces, está bien no ser productivo todo el tiempo.