-Eres un buen padre.
Una voz que venía de detrás de Ji Hoo lo hizo darse la vuelta para ver quién acababa de hablar con el. El hermano de Ha Neul estaba parado detrás de el mientras le daba una sonrisa. Luego se acercó para pararse junto a el.
-¿Esperaste mucho?
Jun Jeong ahora estaba sentado a su lado.
-En realidad no, pero incluso si lo hiciera, no es un problema porque necesito algo de tiempo a solas
La respuesta de Jun Jeong lo hizo asentir con la cabeza.
-¿Está bien Ha Neul? Si todavía se siente enferma, no debería haber venido aquí.
-Ella quería venir porque también quería visitar a su padre. Tal vez ella quería decirles que estaba embarazada de nuestra hija. Pero resultó que el viaje aquí lo empeoró.
-Todavía estoy preocupado por su condición, no me asustes. Sus náuseas matutinas para este embarazo parecían ser graves.
-Dije si. ¿Cómo podría la que está embarazada es tu hermana Haneul, pero tú eres la que se siente sensible?
Ji Hoo negó con la cabeza ante la actitud protectora inmutable de Jun Jeong hacia su esposa.
-No deberías haber dicho eso, no sabes cómo me asusta la condición de Ha Neul.
-Pero al menos puedo hacer que deje de derramar lágrimas. Ha estado aquí varias veces, todavía llora frente a papá.
Las palabras de Jun Jeong hicieron que Ji Hoo lo mirara.
-¿Sobre qué base sientes que no eres un buen padre?
-No sentí que no soy una buen padre, solo quiero preguntarle a tu padre si he estado haciendo un buen trabajo como padre.
Ji Hoo volvió a mirar la tumba frente a ellos.
-Porque si puedes preguntarle, quiero preguntarle si yo he sido un buen padre. ¿No me estoy convirtiendo en un padre como mi padre?
Las palabras pronunciadas en tono triste por Ji Hoo provocaron un silencio entre ellos. Ji Hoo miro a Jun Jeong, desde sus ojos que miraban la tumba de su padre irradiando la honestidad de las preocupaciones que sentía.
-Eres diferente de él