Sus labios tocaron mi mejilla, estaban fríos a causa del viento helado que azotaba nuestros rostros. Sus ojos me pedían más, solo un poco más, pero el corazón es distinto... No reacciona si no es el indicado, no hay cosquilleos, tampoco ganas de amar y eso causa dolor. "Lo siento" susurro "pero mi corazón no te quiere y no lo puedo obligar" partió tu alma, a mi sólo el remordimiento de no corresponder a un amor tan puro como el tuyo. Esa fue la ultima vez que te vi; hasta hoy.
¡¡Hola lunáticos!!