Me gusta escribir, fantasear con historias que van desde lo más blando a lo más duro que os podáis imaginar, siendo todo ello siempre consentido. Mis relatos están llenos de humillaciones, dolor, cosas asquerosísimas, y de vez en cuando, muchas risas cuando me da por hacer comedia.

Por las críticas que recibo, sé que los lectores sienten cada golpe, cada caricia e incluso en casos extremos, sienten en su boca la comida que se tragan mis esclavas.
También indicar que estoy abierto a sugerencias y si alguien quiere desarrollar alguna fantasía, es cuestión de hablarlo. 




El precio de dominar es la responsabilidad. Recuerda que ella se entrega y has de protegerla pues es delicada y entregada a ti al completo.














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